El día 3 de la fase desmilitarizante de la Cultura Antichepística comenzó con un homenaje a los y las jóvenes asesinados como consecuencia de la carrera armamentista que llevan a cabo el sistema de pseudo-seguridad en el país.
Los zapatos representan el espacio vacío dejado por los y las jóvenes que a diario sufren muertes violentas, las flores representan el inicio de una nueva etapa. El acto de convertir zapatos en maceteras, hecho por las manos de jóvenes universitarixs manifiesta el deseo de cambio y transformación.
En el laboratorio de ideas de los antichepistas se formularon las pastillas des-paramilitarizantes Chepilax, un tratamiento profiláctico que le ayudará a conllevar el día a día en esta jungla de parásitos policiales, militares y paramilitares, acompañado del respectivo manual antichepista.
Terminamos la fase des-militarizante de la campaña convocando a todxs lxs antichepistas para la gran Comparsa Antichepística, un festival donde todos podremos ser como queremos ser: Seres alados, ruidosos, coloridos, divertidos, gritones, irreverentes, eclécticos, con muchas ganas de vivir.
