Fiestongo, Chonguengue: La Comparsa Antichepística

¿Y si comenzamos a contar cómo fue la fiesta con Estilo, como la pseudo-revista de pseudo-sociedad?

ACTUALIDAD En un ambiente cosmopolita y urbano lleno de gente fufurufa con apellidos rimbombantes se llevó a cabo la agradable "Comparsa Antichepística", un evento lleno de azúcar flores y muchos colores. Los presentes realizaron diversas actividades recreativas como pintar cerámica y hacer cabildeo en las altas cúpulas de poder.


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Ja! Demasiada diversión como para desperdiciarla recreando esas crónicas tan aburridas y sin sentido. La Comparsa Antichepística fue un éxito queridxs antichepistas! Gritamos a todo pulmón, bailamos, nos pusimos plumas, máscaras, nos uniformamos de alegría y diversidad: ¡MAS POESÍA! ¡MENOS POLICÍA! No somos blancos a los que apuntar rifles y AK-47s, somos energía, plantas, cámaras, burbujas, patinetas, música, una voz que grita ¡NO! ante la militarización.

Ángeles y querubines, brujas, payasos, hadas, jóvenes empoderadxs. Estamos conscientes de lo que vivimos: Un proceso de adoctrinación militar, de violencia sistemática, de servicio militar obligatorio. Los militares ya tienen licencia para matar, la constitución es "interpretada" de cualquier forma para permitir el atropello a los derechos humanos. Esto es una guerra, de un bando la maquinaria armamentista potenciada por la corrupción del estado y del otro nosotrxs y nuestras vida, nuestras ideas, nuestra voz.

En estas dos últimas semanas de viaje hemos representado la realidad. Nos identificamos como las siguientes víctimas: Nos vestimos con dianas que dicen "El siguiente puedo ser yo" y nos enmascaramos para mostrar la disparidad de un presente militarizado. Le dimos cara y género a los asesinatos, expusimos lo que somos para los militares: Basura anónima, crímenes impunes a la vista de todos. ¿Y qué se vino después? Transformar todo eso en aquello a lo que aspiramos. Convertimos los códigos de militarización en un mundo nuestro, digno y libre. Donde había muerte sembramos vida y distribuimos el cambio como cura contra el aparato militar.

¡Y se vino la fiesta!

Agradecemos a todxs lxs que participaron en la campaña, sus manos, sus voces, su presencia que fueron manifestación de que podemos. Ah, y si pensaron que acá terminaba todo pfffttt!!! Por ahora pendientes de los espacios que creamos por el blog y el facebook, que estaremos llegándoles pronto con más ideas, más acciones y más Cultura Antichepística.

Día 3: Desmilitarización

El día 3 de la fase desmilitarizante de la Cultura Antichepística comenzó con un homenaje a los y las jóvenes asesinados como consecuencia de la carrera armamentista que llevan a cabo el sistema de pseudo-seguridad en el país.

Los zapatos representan el espacio vacío dejado por los y las jóvenes que a diario sufren muertes violentas, las flores representan el inicio de una nueva etapa. El acto de convertir zapatos en maceteras, hecho por las manos de jóvenes universitarixs manifiesta el deseo de cambio y transformación.

En el laboratorio de ideas de los antichepistas se formularon las pastillas des-paramilitarizantes Chepilax, un tratamiento profiláctico que le ayudará a conllevar el día a día en esta jungla de parásitos policiales, militares y paramilitares, acompañado del respectivo manual antichepista.

Terminamos la fase des-militarizante de la campaña convocando a todxs lxs antichepistas para la gran Comparsa Antichepística, un festival donde todos podremos ser como queremos ser: Seres alados, ruidosos, coloridos, divertidos, gritones, irreverentes, eclécticos, con muchas ganas de vivir.

Interpretando la Interpretación: A las Puertas del Terror

El día uno de la fase de des-militarización de la Cultura Antichepística tomó lugar en la peatonal principal de la entrada a la Universidad Nacional Autónoma de Honduras ayer lunes 28 de Noviembre. Se realizó una acción con la participación de jóvenes universitarixs, un mini-ejército de zancudos de alambre encerrados en un círculo rojo.

En medio de representaciones de cuerpos tirados manchados de sangre y paneles con las voces escritas de estudiantes que contestaron preguntas como, "¿Para qué sirve un militar?", se comenzaron a tranformar los elementos para dar inicio a la etapa esperanzadora de la campaña. Los vientos fríos y nubes oscuras esa tarde en Tegucigalpa fueron como un presagio de lo que vendría después.


En horas de la noche ese mismo día el Congreso Nacional aprobó un decreto de interpretación del artículo 274 de la Constitución para que las Fuerzas Armadas realicen labores policiales. Sencillamente una formalidad burocrática en el proceso de militarización: El puñetazo en el estómago antes de dispararnos en la cabeza. El estado entiende que hay que aprovechar la salida excesiva de pus de las entrañas de los cuerpos policiales para entregar el país a los militares quienes asumirán funciones de arrestos, allanamientos y ejecución de órdenes judiciales. Entre líneas se lee perseguir, intimidar, torturar y matar que es para lo que realmente están entrenados. Hacen apenas dos años, los policían eran los subalternos de los militares que ejecutaron el golpe de estado. Desde ese momento hasta ahora el presupuesto para seguridad y justicia en el país se ha duplicado. ¡Lxs muertxs también!


Si las fuerzas armadas han sido creadas para defender la integridad territorial y la soberanía de su país por medio del uso de la fuerza y las armas; ¿Contra quién es la guerra? ¿Contra el pueblo? ¿Los y las jóvenes? Podemos sospechar eso dado el incremento de los homocidios, femicidios y la impunidad que los cubre, sabiendo además que dos de cada tres de esxs muertos tenían entre 15 y 34 años.


La campaña armamentista de dominación actúa estratégicamente, entre asesoramiento común y procesos legales absurdos de "interpretación" de la ley. Las reacciones de los antichepistas en Centroamérica no se dejan esperar. Desde El Salvador nos dicen:

Mientras tanto, desde hoy Nicaragua cuenta con una flamante nueva Embajadora de Estados Unidos experta en narcotráfico, tema que siempre ha sido chivo expiatorio del aparato militar. En la zona CA4 se está construyendo el escenario perfecto para llevar a cabo la sistemarización de la violencia y doctrina militar, un escenario donde Honduras es el epicentro y protagonista del momento.


A la luz de todas estas noticias es difícil llevar a cabo una campaña esperanzadora y de celebración. ¿Qué hay que celebrar? El camino en contra de la militarización es una cuesta arriba donde se deben sortear obstáculos constantes sólo para mantenerse en pie, no digamos para avanzar. Mas sin embargo el espíritu de lxs jóvenes se mantiene firme, los ideales de transformación nos dan el combustible para seguir y la Cultura Antichepística se mueve a paso erguido, replantéandose y redefiniéndose ante las puertas ahora abiertas de par en par hacia las nuevas dificultades. La comparsa antichepística no será el fin de dos semanas de acción, será un punto de encuentro determinante para saber qué haremos después.

Comparsa Antichepística

¡Amigxs, compatriotas, romanos! ATENCIÓN: Les sacamos la batiseñal. A todxs lxs antichepistas, a lxs hippies, rockerxs, emos, hipsters, junkies y gente de todas las formas, colores y sabores. Este es un llamado para participar de la Comparsa Antichepística, un chonguengue de miedo con confetti, batucada, arte, música, mensajes del eje del bien y locura.

La Cultura Antichepística fue diseñada para la supervivencia en el enfrentamiento constante contra este leviatán que nos ha declarado la guerra, porque esas armas y esos cascos y esas máscaras antigas no son juguetes ni adornos para colgar en el arbolito en estas épocas navideñas, son una prueba para el alma fuerte y decidida al mejor estilo del circo de leones romano. Así que tomá tu escudo, patineta, Manifiesto Antichepista y vení celebremos las ganas de vivir.

Días 3 y 4

Corre una semana turbulenta en la Universidad Nacional Autónoma de Honduras porque se ha completado una fase estratégica de militarización digna de entrar en los anales del orgullo armamentista. Apuntaron, dispararon y mataron, unos cuerpos se metieron en bolsas y otros se dejaron a la luz del día pero todos al final colgaron los tennis. Víctimas y victimarios sin cara, sin nombre y sin justicia.

La cobertura mediática fue excelente, digna de un Pulitzer al periodismo aunque El Heraldo y La Prensa probablemente tienen tantos que los utilizan como cuña para arreglar las diferencias en las patas de las sillas y mesas en sus oficinas. "Universitarios repudian corrupción policial". ¿Exactamente qué parte del proceso de aniquilación es el que debe depurarse? La parte donde te secuestran, o cuando te sacan mordida, cuando asaltan un banco, cuando te gasean y toletean, cuando te matan; ¿Cuál? 

Talvez este señor bonachón de apariencia promedio pueda decirnos, tomando en cuenta que en realidad es un chepo de incognito enviado para socavar información. Lástima que lxs buenxs antichepistas está preparadxs, para la próxima que se venga en tacones y se haga llamar Natasha talvez así les funciona.

Este es el oscuro presente de sangre y violencia a manos del sistema policial, militar y paramilitar: Muerte, injusticia, abuso, acoso, dominación. La luz en el horizonte la ponemos las y los jóvenes antichepistas. Se viene nuestra fase estratégica: Desmilitarización.